Las apariencias engañan

Me encontraba mirando por la ventana del comedor, absorta en mis pensamientos, cuando de pronto vi pasar una gaviota. Elegante y majestuosa como ella sola. Revoloteo varias veces alrededor del tejado de enfrente hasta que decidió bajar el vuelo. Se posó entre las tejas y me miraba fijamente, con unos ojos que desprendían alegría y a su vez desconcierto. Entonces noté como mis facciones cambiaban y dejaban asomar una sonrisa entrañable. De repente su expresión cambió al ver en el tejado adjunto una paloma con un ala rota. Pensé que quizás los animales sí sentían compasión los unos por los otros. En ese preciso instante la gaviota alzó el vuelo y con un gran estruendo que salió de su garganta, bajó en picado hacia la paloma despedazándola sin piedad. Me pregunto si los niños se plantean todo eso cuando las dibujan alegremente en sus representaciones.

Las apariencias engañan, es un microrrelato que pretende explicar refranes tales como: " No es oro todo lo que reluce", "No juzgues a un libro por su portada", "Fíate de la Virgen y no corras" o bien como su homónimo: "Las apariencias engañan".